SomosTrujillo

RENACIMIENTO TRUJILLANO

 NUESTRO DEBER HOY

Según la real academia española el renacimiento significa: Acción de renacer, otras definiciones: Recuperación de la fuerza, la energía o los ánimos de una persona o de la vigencia e importancia que una cosa había tenido en otro tiempo. En esta idea desarrollaremos nuestro comentario.

Trujillo,  un pueblo con 458 años de historia, en la cual, hemos cimentado las bases para crecer y cada vez ser mejor, con distintas circunstancias y maneras hemos transitado por la historia Patria con la misión de crecer, de ser prósperos, más sin embargo, es común, oír frases tan supersticiosas que invitan a ahondar en el tiempo y las circunstancias,  tales como,  Trujillo no tiene suerte,  tenemos una maldición, es culpa de todos los gobiernos anteriores, entre muchas más.

Pero ¿qué hay de cierto en todas ellas?

En primer lugar, lo fortuito no es seguro, es muy sonado el cuento que hace un tiempo Trujillo recibió una maldición, por el robo de las pertenencias de Alonso Briceño por parte de ciertas familias trujillanas, y se encuentra registrado en Orígenes Trujillanos de Amílcar Fonseca, las cosas sucedieron de la siguiente manera:

“Así en sopor profundo incedente á todo reactivo, entregó S.S. el alma a Dios, sin cumplir los grandes deseos que tuviese, de asegurar los libros á su convento, una suma "con que prosiguieran la fábrica de la Iglesia de Trujillo"  el arreglo de las cuentas de familia con el General don Agustín. De Arévalo Briceño, su hermano, de Chile, o con los herederos, según vale que por $ 15.000 guardaba Fray Diego, hijo de aquel militar, y los salarios, á este sobrino por once años de compañía, "pues quedaba pobre, sin familia y lejos de su país natal y de su convento". Pero sí había enriquecido ya con dádivas bien aseguradas por escrituras públicas al Doctor Gamboa, su tesorero, al padre Nicolás de Caldera, huérfano a quien había criado y hecho educar en Santa Fe, y á sus ahijados el padre Sebastián Alonzo de Rosales, de la ilustre familia de los caballeros de este nombre y al niño nieto del Rexidor perpetuo el Capitán D. Sancho Briceño Graterol.

Correría parejas con la fábula lo extraordinario de las riquezas de este obispo, si no constasen de documentos que la verdad histórica hace respetar. Fuera de cosas curiosas como "el cuadro de San Antonio, verdadero traslado del original, cucharillas de cristal con mango de oro, el báculo de marfil, oro y esmaltes, la mitra guarnecida de cincuenta piedras, verdaderamente preciosas y el pectoral con 18 diamantes, tres esmeraldas y un rubí"; brillaron con nobleza también en esos inventarios, talegas de oro y plata acuñados, muebles de ambos metales para todos los usos (hasta colleras de caracoles de plata que adornaban los perros á que era aficionado el prelado), hebillejas, leontinas, cordones, collares, cruces, sortijas, prenderas con diamantes, esmeraldas de hermosos jardines, rubíes, perlas, zafiros, amatistas de todos quilates, sedas, tafetanes, estameñas, telas del país, algodones, damascos, cuchillería, espejos, mármoles, y lebrillos; e intocada desde el 14 de julio del 1661, la cuarta por diesmo de renta episcopal, la que el Sr. Gobernador Don Pedro de Porras y Toledo, en su visita á Trujillo por el año 1662, había ordenado pagar, y que reposaba aún (1668) en las cajas reales.

Y no son de extrañar así los diversos juicios que se suscitaran, dando que hacer a las justicias, porque los depositarios hubiesen gastado del dinero en remediar la mucha necesidad que por la gran sequía de ese año (1669) tenía la ciudad, de ganados y otros víveres, con qué sustentar a los vecinos; acerca de que Fray Diego ocultase 2.000 pesos en prendas, entre ellas las reliquias de Tierra Santa; en cuanto á que Gamboa luciese todavía el verde paraguas de primavera labrada; tocante á que Nicolás Mapocho, paje de este Secretario, hubiese abierto al espirar el obispo un escritorio de palo de rosa con guarniciones ‑de nácar y ocultado entre el seno debajo del gabán unos platillos de plata y unos candeleros, al parecer de azofar, y sobre, por últimos, que la vasija medicinal de hezares, apareciese en casa de Fernández Graterol, que padecía de venéreo; la obra El Quijote (edición de Juan de la Cuesta)  el Ruperti Opera, Confessioni Divi Augustini, el Molina, Berrero philosoffia y otros muchos y variados textos, así eclesiásticos y teológicos, como de literatura y otras ciencias, en manos de Marcos Vásquez, de Francisco de Cuenca, de Tomás de Castro y de otros vecinos; además de que el negro esclavo Francisco Games y su mujer Magdalena, ocho días después de fallecer el obispo hubiesen vendido al artífice Marcos de Reina, prendas de oro y plata, y ropas y otros muebles á varias familias.

Tampoco alarmaría á los vecinos cómplices la Real Cédula de S.M. la Reina gobernadora (á 10 de agosto de 1670), declarando espolios la riqueza del obispo, y por ende perteneciente como legítima heredera á la Catedral; ni la orden de entrega que, el Dean y Cabildo en sede vacante hiciesen acompañar, para los morosos, del terrible anatema siguiente:

"Y si pasados tres días; y por q creziente la culpa, y contumacia debe crecer la pena, mandamos a los dhos curas, q en dha sta yglesia parrochial los domingos y fiestas de guardar, teniendo una + cubierta con velo negro, y un acetre de agua, y candelas enzendidas os anatematízen y maldigan con las maldiciones siguientes. Malditos sean los dhos excomulgados de Dios y de su bendita madre: Amen. Huérfanos se vean sus hijos y sus mujeres viudas; Amen. El sol se les escurezca de día y la luna de noche: Amen. Mendigando anden de puerta en puerta y no hallen quien bien les haga: Amen. Las plagas, que enbio Dios sobre ‑el reyno de Egipto vengan sobre ellos: Amen. La maldición de Sodoma, Gomorra, Datan y Abiron, que por sus pecados los tragó vivos la tierra vengan sobre ellos: Amen. Con las demas maldiciones del psalmo Deus laudem meam neta cueris. Y dichas las dhas maldiciones lanzando las dhas candelas en el agua digan: assi como estas candelas mueren en esta agua, mueran las ánimas de los dhos excomulgados y deciendan al infierno con los judas apostatas; Amen".”

Esta fue la sentencia, la cual muchos de los trujillanos justifican el atraso cultural, social y el menguado arraigo del mismo con lo suyo.

Es interesante, esta justificación por parte de muchos coterráneos, Sigmund Freud lo define como Mecanismos de Defensa Inconscientes,  y son formas inconscientes de actuar o de pensar para protegernos o defendernos de pensamientos, deseos, emociones o comportamientos demasiado amenazantes para la conservación de nuestra integridad. Es decir, hacemos barreras imaginarias muy dificultosas de cumplir para “perdonar” lo incumplido.

Este es nuestro caso, estamos constantemente protegiendo nuestra integridad culpando a lo pasado, lo que vivimos o lo que vendrá, estamos en un círculo vicioso de miedos, prejuicios y experiencias fallidas que limitan el progreso continuo.

Freud las enumera en 7, desarrollándolas así, Represión, Negación, Disociación, Racionalización, Proyección, Desplazamiento, Formación reactiva. y esto nos enseña que Históricamente hemos reprimido muchos cosas que han terminado en frustraciones vivas y lo lamentable es que no reconocemos el gran daño social y cultural en el que nos encontramos, tanto así, que copiemos culturas distintas y esto es producto de esta disociación cultural en la que estamos que privilegia lo extranjero y en consecuencia no promueve lo nuestro y lo peor es que en la actualidad proyectamos nuestros males en enemigos efímeros, tales como el Imperio o el Pitiyanqui  o el enemigo de la Patria, que a su vez es venezolano. Y las necesidades vitales, tales como Unión Nacional, Encuentro Fraterno, la Familia, los Valores,   los llevamos a un segundo plano restándole la impotencia que merece. Todo esto es consecuencia de nuestra justificación, enemiga principal del progreso humano sustentable.

Juan Lizcano nos ilustra que “la cultura según sus diversas acepciones de la planetaria a la tribal y primitiva, tienen su origen en la naturaleza humana y no sería concebible si nuestra especie desapareciera, la cultura es hacer, pensar, construir, edificar, derrumbar, obrar con inteligencia, con la mano y sus extensiones, las herramientas, las técnicas en su increíble crecimiento, constituye ya una supra-naturaleza, la cultura comienza siendo fruto de la cría y el cultivo de las tierras, su cuerpo, ritual ceremonial religioso, nace de una confrontación con la naturaleza que le fue dada al hombre, luego modificada y crea nuevas formas cuando se vuelve urbana. En ese largo hacer cultural la especie alcanza hoy la posibilidad inaudita de destruirse así misma de un golpe y destruirlas formas de la vida animal y agraria indispensable a la especie, hoy más que nunca, más que los tiempos de intensa religiosidad más que las  sextas míticas o esotéricas de todos los países y edades, se impone la interrogación suprema a la cual no cotensia la ciencia ni la técnica, del fin del mundo y del hombre, la ausencia de respuesta está en el centro de la gran neurosis contemporánea occidental”.

Por estos motivos, hemos emprendido un camino integrador  de progreso, que desea la incorporación de toda la sociedad trujillana para la restructuración de nuestro terruño, llego la hora del renacimiento trujillano, INSTITUCIONAL, CULTURAL Y MORAL donde todos como ciudadanos pongamos nuestra contribución para sacar adelante esta noble y hermosa comarca signada de gloriosa historia y de gente de trabajado y culta.

Creemos nuestra identidad regional, esa que, Laudelino Mejías en la Música, Rafaela Castellanos   en la Pintura, los dos grandes tocayos Mario Briceño Irragorry y Mario Briceño Perozo tanto en Historia como en Política, Pedro Vivas en el Periodismo, Carrillo Guerra en gerencia, Política y Ciudadanía Arnoldo Gabaldon en las ciencias, echaron los cimientos de la nueva trujillanidad, productiva, integradora y honrosa de su tierra, así mismo nosotros estamos en el deber Patrio de crear nuestro acervo cultural , institucional y moral con expresiones enriquecedoras, conectadas las unas con las otras para revolucionar nuestro municipio.

Regalemos a generaciones futuras un patrimonio amplio, que inspire, que aliente y que genere más futuro, la marcha la debemos emprender ahora, es ya, y es tu deber para así, desmontar todo obstáculo imaginario y emprender ese aquí y ahora que cambiara el mañana.

Hagamos de nuestra cultura un hecho cotidiano valioso, entronizado en una educación, formativa ilustrativa y vivencial en la cual el ciudadano, más que aprender,  aprehenda y lo haga cotidiano, con el fin, de que ese poblador  se incorpore en la  nueva cultura restauradora y su producto sea perdurable.

Cambiando nosotros como sociedad lograremos cambiar modelos erráticos que nos conllevan al fracaso y a la desvalorización de instituciones y patrimonios y que a su vez se nota en el deterioro moral de la ciudadanía, creando esta nueva historia cultural lograremos más, y con eficiencia y calidad, es nuestra la oportunidad es nuestra la misión.

Que la trujillanidad sea mentalidad, que la trujillanidad sea nuestra fuerza de progreso, que nos definamos como pertenecientes a una  sensibilidad y memoria colectiva común, y que en ella cree hábitos y  directrices morales por donde nos encausemos como civilización. Así nos identificaremos y crearemos una identidad local solidad tal como la del maracucho o la del tachirense

Vamos pues sintiéndonos trujillanos de corazón y cepa a cambiar en cada acción, para mejorar y honrar lo que nos antecede y crear y formar el  porvenir. Vamos pues con alegría, vamos pues con entusiasmo SOMOS TRUJILLO!!!

César Leonardo Berrios Méndez  C.I. 20.401.151